OVIEDO, 19 Ago.

El asesor de Salud del Gobierno asturiano, Pablo Fernández, ha relacionado el aumento de defunciones registrada en los siete primeros meses del año a la situación de pandemia por COVID-19.

Ha sido en la rueda de prensa posterior a la asamblea al Consejo de Gobierno en el momento en que Fernández fué preguntado por los últimos datos, que registran aumentos en toda España. En lo que tiene relación a Asturias hubo 8.287 defunciones en los siete primeros meses del año, un 7,52% mucho más que en exactamente el mismo intérvalo de tiempo de 2021. En relación a exactamente las mismas semanas de 2019, antes del comienzo de la pandemia, los muertos se han aumentado en Asturias un 9,12%, según las cantidades publicadas por el Instituto Nacional de Estadística.

"Pienso que no voy a conocer nada si digo que proseguimos en pandemia", indicó Fernández en su contestación. "Los datos, en ocasiones, nos ponen en la verdad", ha añadido.

"Tuvimos ondas epidémicas este año", ha recordado el dirigente asturiano sobre la incidencia de la COVID-19, más allá de que ha precisado que los efectos no fueron tan dañinos merced al alto número de personas que se han vacunado, en especial en Asturias.

Quienes están falleciendo en este preciso momento son la gente mucho más débiles, según indicó el asesor, como los mayores, quienes tienen ahora inconvenientes esenciales de salud o pacientes con tratamientos inmunodepresores que hacen que las vacunas no funcionen del mismo modo. Ha recordado Fernández que Asturias tiene la mayor tasa de envejecimiento, con lo que no es de extrañar que haya mucho más capital o mortalidad. "No obstante no somos la red social autónoma que mayor letalidad tuvo y tiene", ha comentado.

En cualquier situación, Fernández ha reconocido que hay "preocupación" en relación al aumento de defunciones y que los especialistas de Salud Pública lo están examinando. "No pasamos página, proseguimos dedicando varios elementos a la pandemia y alerta a todo ello", ha concluido.