El Principado de Asturias ha sido testigo de un total de 1.952 abortos en el año 2023, lo que ha llevado a una tasa de 13,15 interrupciones voluntarias de embarazo por cada 1.000 mujeres en edad fértil. Estos números representan un aumento significativo con respecto al año anterior, cuando la tasa se situaba en 12,45, según el Registro Estatal de Interrupciones Voluntarias del Embarazo publicado por el Ministerio de Sanidad. En comparación con otras comunidades autónomas, Asturias ocupa el cuarto lugar en términos de la tasa de abortos, solo detrás de Cataluña, Madrid y Baleares.
En la región asturiana, se han realizado abortos en diferentes grupos de edad: seis en menores de quince años, 200 en jóvenes de entre 15 y 19 años, 411 en mujeres de entre 20 y 24 años, 405 en mujeres de entre 25 y 29 años, 344 en mujeres de 30 a 34 años, 386 en mujeres de entre 35 y 39 años, 190 en mujeres de 40 a 44 años, y 10 en mujeres mayores de 44 años.
De todas las mujeres que han optado por un aborto, 1.079 no tenían hijos, 485 tenían un hijo, 283 tenían dos hijos, 76 tenían tres hijos, 23 tenían cuatro hijos, y 6 tenían cinco o más hijos. Asimismo, 1.316 mujeres no habían tenido abortos previos, 468 habían tenido uno, 115 habían tenido dos, 34 habían tenido tres, 10 habían tenido cuatro, y 9 habían tenido cinco o más abortos voluntarios.
La mayoría de los abortos se llevaron a cabo en las ocho primeras semanas de gestación, con un total de 1.496 procedimientos. Otros 382 abortos se realizaron entre las semanas 9 y 14, 67 entre las semanas 15 y 22, y siete a partir de las 23 semanas de gestación.
En cuanto a los motivos de interrupción, 1.852 abortos fueron a petición de la mujer, 33 debido a un grave riesgo para la vida o la salud de la embarazada, 56 por riesgo de graves anomalías en el feto, 10 por anomalías fetales incompatibles con la vida o enfermedades extremadamente graves e incurables, y uno por "varios motivos".
A nivel nacional, España ha registrado un total de 103.097 interrupciones voluntarias del embarazo en 2023, lo que representa un aumento del 4,8% respecto al año anterior y del 8,7% en comparación con 2014. Estos números revelan un incremento en la incidencia de este procedimiento en los últimos años.
Los datos también muestran que la tasa de interrupciones voluntarias del embarazo en España fue de 12,22 por cada 1.000 mujeres entre 15 y 44 años en 2023, superando las tasas de años anteriores. Cataluña lidera en este aspecto con una tasa de 14,92, seguida de cerca por la Comunidad de Madrid con 13,92, mientras que Aragón registra la tasa más baja con 8,4 por cada 1.000 mujeres.
En suma, los datos recopilados ponen de manifiesto la necesidad de seguir trabajando en la educación sexual y reproductiva, así como en el acceso a métodos anticonceptivos, para disminuir el número de embarazos no deseados en el país.
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