OVIEDO, 1 Sep. - El consejero de Ciencia, Empresas, Formación y Empleo, Borja Sánchez, ha explicado este viernes que la decisión de ubicar la sede del polo de innovación del occidente en Luarca es consecuencia de una decisión política de la alcaldesa de Navia, Ana Isabel Fernández. Según el consejero, los nuevos usos planteados por el gobierno local para el inmueble resultan incompatibles con las tareas propias de un polo de innovación.

En declaraciones a los medios, el consejero destaca que inicialmente se había previsto instalar la sede en Navia, en un edificio que la Fundación Manuel Suárez estaba dispuesta a ceder. Sin embargo, el Ayuntamiento de Navia tenía planes de instalar una escuela de 0 a 3 años, actividades culturales y bibliotecarias, así como una planta para acciones formativas y de innovación para empresas, que no eran compatibles con la actividad empresarial de innovación.

El consejero señala que en la reunión con la alcaldesa se le hizo saber que estos usos eran incompatibles, por lo que entiende que Ana Isabel Fernández estaba al tanto de la situación. Además, también recuerda el proceso de negociación con la Fundación Manuel Suárez, que finalmente se retiró de la cesión del edificio en Navia.

Sánchez destaca la importancia de no quedarse sin llevar a cabo una inversión tan relevante para el occidente. Afirmó que se van a impulsar programas y políticas de innovación que serán transformadores para la región. El polo de innovación comenzará a funcionar este año en un edificio de tres plantas cedido por el Ayuntamiento de Valdés. Para las primeras acciones se cuenta con una partida de 100.000 euros consignada en la Consejería de Ciencia. En el desarrollo del proyecto participarán instituciones como la Universidad de Oviedo, la Fundación Caja Rural y empresas de la comarca.