Oliver Suárez (Vox) abandona el partido por ser considerado desleal al buscar el diálogo.
El concejal de Vox en el Ayuntamiento de Gijón, Oliver Suárez, ha anunciado su salida del partido debido a las acusaciones de "deslealtad" por parte de la portavoz de su grupo municipal, Sara Álvarez Rouco. Según Suárez, estas acusaciones surgieron por apelar al diálogo con partidos democráticos, en lugar de hacerlo con Bildu, los separatistas o los comunistas que apoyan a los criminales de Hamás. Suárez ha dejado claro que no se van a deshacer de él, sino que él se va del partido.
El concejal ha expresado su descontento con los cambios que ha experimentado Vox, alegando que el partido ya no es el mismo en el que militaba. Según él, antes cabían todo tipo de corrientes, desde liberales hasta conservadores, pero ahora impera el ordeno y mando sin posibilidad de ser escuchados. Suárez ha reflexionado que muchos tienen miedo dentro de su propia casa, refiriéndose a la falta de libertad de expresión.
Respecto a las acusaciones de deslealtad, el concejal ha señalado que no entendía por qué no le abrieron un expediente disciplinario o lo expulsaron directamente. Apelar al diálogo entre los tres partidos que sustentan el gobierno de Gijón no debería ser considerado como deslealtad, sino como una forma de reconducir un acuerdo y frenar el regreso de las izquierdas.
En cuanto a su primer comunicado, Suárez ha mencionado que fue prudente debido a la esperanza de que el asunto se resolviera. Ha dejado claro que podría haber contado muchas cosas más, pero decidió no hacerlo. Por otro lado, ha instado a la alcaldesa de Gijón y a la portavoz del Partido Popular a que aclaren qué rumbo desean seguir.
El concejal ha adelantado que no estará dispuesto a seguir el rumbo del PSOE y su líder "Floro", quienes ya han comenzado a insultar. Suárez ha concluido diciendo que si todas las partes tienen claro lo que quieren, la gobernabilidad estará garantizada y él superará esta "pesadilla", para poder trabajar todos por el bien de Gijón.