El próximo martes, día 1 de octubre, el área sanitaria III, con sede en Avilés, dará inicio a la selección de la población candidata para participar en el primer cribado de cáncer de pulmón a través de una prueba de imagen. Esta iniciativa tiene como objetivo detectar de manera temprana la enfermedad en fumadores habituales y exfumadores.
El proyecto piloto a nivel nacional, llamado Cassandra, se enfoca en el paciente, brindándole la oportunidad de recibir formación, prevención y ayuda para dejar de fumar. La inclusión del área sanitaria III en este estudio lo convierte en la vigésima organización en participar en el país, según ha comunicado el Principado en un comunicado de prensa.
La población objetivo de este estudio son personas asintomáticas de entre 50 y 75 años, exfumadoras con menos de 15 años de abstinencia, y que hayan consumido al menos 20 paquetes de cigarrillos al año.
Además de la detección de posibles lesiones pulmonares, el programa se enfoca en la deshabituación tabáquica, pruebas funcionales respiratorias y la utilización de la tomografía computarizada de baja dosis para obtener una evaluación integral de la persona.
La invitación a participar en el estudio y el seguimiento de los casos estarán a cargo de las redes de atención primaria y hospitalaria, a través de consultas de Neumología. Una enfermera brindará orientación a los participantes durante el proceso.
La evaluación de los participantes incluirá un cuestionario epidemiológico y, en el caso de fumadores activos, una consulta de deshabituación tabáquica. La inclusión en el estudio y la realización de la exploración mediante TAC de baja dosis dependerán de los resultados obtenidos.
Los pacientes deben mantenerse estables desde el punto de vista respiratorio y no presentar síntomas sospechosos de cáncer de pulmón para participar en el programa. Aquellas personas que experimenten empeoramientos serán excluidas del proyecto y derivadas a otro estudio.
El programa de cribado se extenderá durante un periodo de cinco años, con seguimiento a todos los pacientes, independientemente de la cantidad de exploraciones radiológicas realizadas. El seguimiento epidemiológico se llevará a cabo durante 10 años.
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