La Guardia Civil está tratando de identificar a los responsables de un altercado que tuvo lugar en Moreda, en el que un grupo de jóvenes "conocidos por los agentes debido a problemas de convivencia con los vecinos" tuvo que ser escoltado hasta salir de la localidad hacia otras zonas de Asturias. Dentro del grupo de jóvenes se encontraban cinco personas y un recién nacido, hijo de uno de ellos.

De acuerdo con la información proporcionada por la Guardia Civil, los hechos ocurrieron a las 19:20 horas del sábado, cuando una patrulla de Seguridad Ciudadana del Puesto de Moreda, que se encontraba en la calle Conde de Guadalhorce, presenció cómo una persona increpaba al grupo de jóvenes.

Junto con la Policía Local de Aller, presente también en la zona, los agentes se acercaron al lugar del incidente para evitar que la situación empeorara. En ese momento, un grupo numeroso de personas que se encontraba en la zona de ocio de la localidad se aproximó, profiriendo gritos contra los jóvenes e incluso agrediendo a algunos de ellos con manotazos.

De forma inmediata, tanto las patrullas de la Guardia Civil como la Policía Local establecieron un perímetro de protección alrededor de los jóvenes para evitar agresiones más graves. Durante este cerco, un agente de la Guardia Civil recibió un golpe en la cara, sin consecuencias graves.

La situación se fue intensificando, lo que llevó a que el Centro Operativo de Servicios (COS) de la Guardia Civil enviara varias patrullas de Seguridad Ciudadana, Tráfico y agentes de la USECIC a la zona.

Dada la continua afluencia de personas, a las 22:40 horas se decidió trasladar a los jóvenes a otras localidades de Asturias en un vehículo de transporte público, estableciendo un dispositivo de seguridad que permitió su salida del lugar y su traslado sin incidentes relevantes.