
Yolanda Díaz critica que el único mérito de estas personas sea "violar los derechos humanos y pisotear la democracia".
El Consejo de Ministros ha aprobado hoy, por propuesta del Ministerio de Trabajo, la retirada de la medalla al mérito en el trabajo al dictador Francisco Franco y a otros destacados líderes relacionados con la dictadura.
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha comparecido en la Moncloa para informar sobre la revocación de esta condecoración, en virtud del artículo 42 de la Ley de Memoria Democrática, que afecta, como ha enfatizado, al propio dictador.
"El único mérito que han tenido estas personas a las que se les retira hoy esta distinción es haber trabajado para violar y violar los derechos humanos y pisotear la democracia en nuestro país", ha resaltado.
En concreto, la retirada de esta distinción se extiende a otros ocho altos cargos del régimen, además de Franco. Entre ellos se encuentran antiguos militares y ministros como José Luis Arrese, Juan Yagüe, José Antonio Girón, Jesús Romero Gorría, José Solís Ruiz, José María Fernández Ladreda (también ex alcalde de Oviedo), el cardenal Enrique Plá y Deniel y el militar y ex alcalde de Cádiz José León de Carranza.
En su comparecencia, Díaz ha destacado, por ejemplo, que Yagüe es conocido como el "carnicero de Burgos"; Romero Gorría promovió la prohibición de las huelgas, violó el derecho a la asociación y creó el modelo de sindicato vertical; Arrese fue secretario general del Movimiento franquista, y Pla y Daniel fue el "instigador y teórico del golpe de estado".
En resumen, la ministra ha condenado que todos ellos tienen un "historial que cuestiona la democracia" en España y, por lo tanto, ha afirmado que al retirarles esta distinción se cumple la Ley de Memoria Democrática.
No obstante, ha expresado su "tristeza" de que sea en el año 2023 cuando se procede a retirar estas medallas al mérito del trabajo a personas que representan "lo peor del régimen" franquista.
"La memoria democrática no permite áreas grises, al igual que la justicia y la reparación de las víctimas de la dictadura. Hoy, con la retirada de las medallas franquistas, cumplimos con la ley y contribuimos, ante todo, a dignificar las instituciones de nuestro país", también ha transmitido en las redes sociales.
NO ES VOLVER AL PASADO, SINO MIRAR AL FUTURO
También ha explicado que "en ningún caso están volviendo al pasado", sino que miran hacia el futuro. "Estamos asumiendo un mandato ético, y ahora también legal e ineludible, que niega el olvido y otorga la justa y debida reparación. Porque es imposible construir un futuro sólido sobre el dolor, la muerte y la indefensión de miles y miles de personas", ha subrayado.
Desde su departamento señalan que es importante destacar que Francisco Franco fue galardonado con un reconocimiento específico y de carácter extraordinario creado especialmente en su honor: la Medalla de Oro Laureada al Mérito y al Sacrificio en el Trabajo, el 18 de julio de 1953.
YA DIJO QUE TENÍAN LAS "MANOS MANCHADAS DE SANGRE"
Díaz ya adelantó en octubre del año pasado que iba a proceder a despojar de esta distinción tanto a Franco como a otros líderes de su régimen, y su previsión era hacerlo con un total de 62 personalidades que tenían "las manos manchadas de sangre".
En su momento, señaló que la desposesión de esta condecoración que otorga el Ministerio se aplica en virtud del artículo 42 de la nueva ley, que permite revisar los premios y galardones otorgados por el Gobierno cuando el beneficiario haya formado parte del aparato de represión franquista o haya incurrido en conductas incompatibles con los valores democráticos y el respeto a los Derechos Humanos.
La vicepresidenta subrayó que estos reconocimientos a líderes franquistas son una "infamia" y que es necesario restablecer la "dignidad", la "justicia" y la "reparación" acorde con el mandato democrático. "No puede haber áreas grises en este asunto", concluyó.
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