El incendio ha devastado casi 38,000 hectáreas en lo que va de año, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO). Esta cifra representa una disminución del 42,4% en comparación con el mismo periodo del año pasado y un 44,5% menos que la media de la última década.

El año 2024 se posiciona como el cuarto año con menos hectáreas quemadas en la última década, muy lejos de los números alarmantes de 2023 y 2022. En este último, se habían quemado más de 227,000 hectáreas para esta misma época del año.

MITECO informó que de los 4,240 incendios registrados hasta ahora, la mayoría han sido conatos y se han controlado antes de afectar una hectárea de terreno. Solo 14 incendios han sido considerados grandes, afectando a más de 500 hectáreas. A pesar de acercarse a los números del año pasado, el 2022 registró 50 grandes incendios para esta misma fecha.

En cuanto al tipo de vegetación afectada, se han quemado más de 8,900 hectáreas de superficie arbolada, más de 22,000 hectáreas de matorral y monte abierto, y casi 7,000 hectáreas de pastos y dehesas.