El debate en torno a la instalación de Costco en Siero ha ganado intensidad, especialmente tras las declaraciones del secretario general de CCOO en Asturias, José Manuel Zapico. Según él, esta iniciativa es un "empeño personal" del alcalde Ángel García y no aporta beneficios estratégicos para la región, además de carecer de validez legal.

Zapico ha manifestado que la respuesta del alcalde ante las críticas que rodean la llegada de la empresa estadounidense se basa en "insultos y calumnias". Esta actitud, según el sindicalista, pone de manifiesto la fragilidad tanto del proyecto como de la figura política que lo impulsa, quien siempre parece estar en el centro de la controversia.

El sindicato ha dirigido su atención hacia las posibles repercusiones negativas que la gran superficie podría tener sobre el comercio local. A pesar de que se habla de la creación de alrededor de 200 empleos, Zapico ha destacado que esto no considera la pérdida de numerosas pequeñas tiendas, que en los últimos 15 años han visto extinguirse más de 5,000 empleos en el sector comerciante.

Además, el líder sindical ha alertado sobre una posible violación de la normativa vigente por parte del Ayuntamiento, al mostrarse dispuesto a ignorar las restricciones comerciales que rigen la instalación de este tipo de negocios en zonas industriales. Zapico ha cuestionado cómo el deseo personal del alcalde puede amenazar la estabilidad de muchos emprendedores y trabajadores locales que dependen de sus comercios para subsistir.

Zapico ha advertido que la tendencia hacia la instalación de grandes superficies está en contra de lo que ocurre en las ciudades más avanzadas de Europa, que apuestan por el fortalecimiento del comercio de cercanía y la economía local. Concluyó enfatizando que el desarrollo de Asturias debe priorizar el bienestar de sus trabajadores y que la introducción de una gran superficie desarraigada no es un proyecto que beneficie a la región.