OVIEDO, 31 de octubre.

El diputado del Partido Popular en Asturias, Luis Venta, ha anunciado su intención de solicitar explicaciones al Gobierno del Principado por la suspensión del programa de control del lobo durante casi dos meses. Esta paralización se debe a la falta de respuesta oportuna del departamento de Medio Rural a un recurso presentado por Verdes por Asturias-Equo, que cuestionó la resolución aprobada en abril para llevar a cabo las actuaciones de control.

Venta ha calificado de "inaceptable" el silencio del Gobierno, señalando que esta actitud opaca y negligente está perjudicando gravemente a los ganaderos de Asturias. "Hacer como si no pasara nada con la esperanza de que nadie se diera cuenta es completamente inexcusable", ha afirmado el parlamentario.

En su intervención, Venta ha denunciado un “período de engaño y falta de información de seis meses” y ha responsabilizado al consejero de Medio Rural, Marcelino Marcos, por no haber sido honesto en sus respuestas sobre el plan de control. "Si realmente le importa la opinión de los ciudadanos, debe ofrecer una explicación clara sobre esta paralización y la desinformación que ha afectado tanto a los ganaderos como a las organizaciones agrarias", ha añadido.

A lo largo de su discurso, Vente ha mencionado que, a pesar del aumento de los daños en las explotaciones ganaderas y las peticiones urgentes de acción por parte de los ganaderos, el programa de control ha estado detenido sin que haya habido comunicación al respecto. “Todo eso ha sido un engaño; mientras el Gobierno ignoraba la realidad, el sector ganadero estaba sufriendo”, ha subrayado.

Además, el diputado ha recordado que, tras la exclusión del lobo del Listado Especial de Especies Protegidas (Lespre) hace siete meses, la situación actual en Asturias sigue sin cambios significativos, lo que para él es una prueba de que "este Gobierno prioriza la protección del lobo sobre los intereses de nuestros agricultores".

Finalmente, Venta concluyó su intervención señalando que "el actual Ejecutivo de Adrián Barbón ha evidenciado su postura antiganadera y su preferencia por complacer a grupos ecologistas en lugar de defender los derechos e intereses del ámbito rural asturiano”.