Joven sentenciado a prisión por tener encuentro sexual con menor bajo influencia del alcohol.

Joven sentenciado a prisión por tener encuentro sexual con menor bajo influencia del alcohol.

Un joven ha sido sentenciado a dos años de prisión y al pago de una indemnización de 20.000 euros por mantener relaciones sexuales con una menor mientras ambos estaban ebrios en una calle de Llanes. El procesado, que previamente había admitido su culpabilidad, aceptó la condena impuesta por la Fiscalía del Principado de Asturias y la acusación particular.

La vista para confirmar el acuerdo entre las partes se llevó a cabo en la Sección Octava de la Audiencia Provincial, ubicada en Oviedo.

Según el comunicado de prensa de la Fiscalía, los hechos ocurrieron alrededor de las 2:00 horas del 15 de julio de 2020. El joven, de 30 años, se encontraba con sus amigos en una zona de bares de Llanes cuando se acercó a un grupo de chicas de 16 y 17 años, incluida la víctima de 16 años.

Después de una hora de conversación, alrededor de las 3:00 horas, se alejaron unos metros del lugar y, a pesar de que la menor "estaba muy afectada" por el consumo de alcohol, el procesado aprovechó la situación y mantuvieron relaciones sexuales en la calle La Calzada 2 de Llanes, a la vista de otras personas. La menor se encontraba inconsciente en el momento del acto sexual.

Las pruebas realizadas a la adolescente revelaron un nivel de alcohol en sangre de 2,70 gramos por litro. El procesado llevó a cabo los hechos habiendo consumido alcohol, lo que afectó sus habilidades intelectuales y voluntarias.

Antes de la ratificación del acuerdo, el procesado pagó la cantidad de 20.000 euros. Los hechos fueron considerados como un delito de abuso sexual según el Código Penal vigente en esa fecha. Se aplicaron las atenuantes de embriaguez y reparación del daño.

Tras admitir los hechos y con el consentimiento de las acusaciones, el procesado aceptó una condena de dos años de prisión, la inhabilitación especial del derecho de sufragio pasivo durante ese período, la libertad vigilada durante cinco años, que consiste en asistir a un programa educativo sobre educación sexual, además de cumplir una pena de prohibición de aproximarse a la chica, su domicilio, lugar de trabajo o cualquier lugar donde se encuentre a una distancia menor a 200 metros, así como la prohibición de comunicarse con ella durante diez años por cualquier medio o método.

Además, el procesado deberá indemnizar al representante legal de la menor con 20.000 euros por los daños y perjuicios causados, una cantidad que ya ha sido depositada y a la que se aplicarán los intereses legales correspondientes.

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