OVIEDO, 25 de junio. La Guardia Civil tuvo que intervenir este miércoles para rescatar a una peregrina estadounidense y a sus tres hijos, quienes se encontraron perdidos en el occidente asturiano debido a las adversas condiciones meteorológicas, como la lluvia y la niebla. Según informaron fuentes policiales, la familia no estaba adecuadamente equipada para enfrentar el clima.

La situación se desató alrededor de las 10:30 horas, cuando la madre decidió contactar al servicio de emergencias 112 de Asturias, que redirigió su llamada a la Guardia Civil. La mujer mencionó que estaba realizando el Camino de Santiago acompañada de sus hijos, dos de los cuales son menores de edad, de ocho y once años, y que necesitaban asistencia debido a que se habían desorientado.

En su comunicación, indicaron que su localización aproximada era el Alto La Marta, dentro del municipio de Allande. La Guardia Civil actuó de inmediato, alertando a la patrulla del Seprona de Vegadeo, que era la más cercana al área, para que emprendieran las labores de búsqueda y rescate.

Los agentes comenzaron su búsqueda conduciendo por la región, pero tras no poder localizar a la familia, procedieron a realizar una segunda búsqueda a pie, una decisión tomada tras determinar sus coordenadas exactas, dado el complicado terreno y las condiciones climáticas.

Finalmente, en un bosque de pinos, los cuatro peregrinos fueron encontrados. Se encontraban empapados y con frío, vistiendo ropa inadecuada tanto para el sendero como para el mal tiempo que enfrentaban.

Los efectivos de la Guardia Civil les proporcionaron ropa caliente y ayudaron a transportar sus mochilas colina arriba hasta alcanzar el Alto La Marta. Una vez allí, fueron transportados en un vehículo oficial hasta la localidad de Berducedo, en Allande. Al rechazar la atención médica, optaron por alojarse en un albergue de la zona.

Se supo que la familia había acampado la noche anterior en un pinar y quedó sorprendida por el temporal que azotó la región durante la noche y la mañana del mismo día.

Su ruta estaba prevista entre Borres, en Tineo, y Berducedo, en Allande, pero la densa niebla y las adversas condiciones del terreno contribuyeron a que se perdieran, intentando regresar al inicio del trayecto.