En medio de un conflicto legal entre Renfe y Talgo, ambas empresas han agotado la fase de conciliación relacionada con las compensaciones que la empresa ferroviaria estatal ha solicitado al fabricante de trenes por el retraso en la entrega de las unidades Avril. Según fuentes del operador, este desacuerdo está a punto de pasar a la fase judicial.

La reclamación inicial ascendía a 116,6 millones de euros por el retraso de dos años en la entrega de los trenes Avril, una cantidad que se consideraba incluida en las condiciones del contrato y por tanto no requería acción legal. Sin embargo, se sumaron 50 millones de euros por el lucro cesante sufrido por Renfe debido a este retraso, además de 80.000 euros por cada día adicional de demora desde el 1 de abril por daños y perjuicios.

Estas nuevas exigencias necesitarán ser atendidas a través de la vía judicial, tras no llegar a un acuerdo en la fase conciliadora. La demanda aún no ha sido presentada, pero se espera que se lleve a cabo en un futuro próximo.

Además de estas compensaciones, Renfe también ha solicitado a Talgo indemnizaciones por los fallos técnicos que experimentaron los trenes durante sus primeros meses de funcionamiento, generando costos adicionales para la empresa estatal al tener que compensar a los usuarios afectados. El monto de estas nuevas reclamaciones aún está por determinar.

Antes de que el conflicto llegue a los tribunales, Renfe y Talgo han intercambiado argumentos y documentos para respaldar sus respectivas posturas. A principios de año, ambas compañías ya se enfrentaron cuando Talgo afirmó no haber recibido ninguna reclamación, lo que llevó a Renfe a incrementar la compensación solicitada.

A pesar de las tensiones surgidas por los problemas técnicos en los trenes y el veto a un cliente potencial de Talgo, en las últimas semanas ha habido un acercamiento entre ambas empresas para resolver los problemas existentes. Según el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, la reacción positiva de Talgo ha permitido poner en servicio la mayoría de los trenes entregados, aunque aún quedan 8 por ser recibidos.